lunes, 1 de febrero de 2021

proyección

No nos damos cuenta hasta que llega la pena
de todo lo bien que lo estábamos pasando,
de lo feliz que nos hacía quien ya no está,
de lo bonitas que son las caricias mientras duermes
de quien ya no comparte ni cama contigo.
Siempre se necesita un ratito de guerra
donde poder pensar,
donde poder darte cuenta,
de si el amor es tanto como pensamos,
de si la pena viene de dentro o de fuera.
He aprendido tanto desde que te has ido
que ya no creo que la gente me moleste 
sino que yo me molesto a través de la gente,
ya no creo que hay días que no quiero a nadie
si no que hay días que no sé dejarme querer
siento que el daño ya no me lo hacen los otros,
sino que me lo hago a mi misma o me dejo hacer.
Aprender a dejarnos cuidar de forma buena,
que no haya daño no significa que más te quiera,
cuando lloras y te das cuenta
de que lo que te duele por dentro se ve también por fuera,
que cuando te dicen una frase y se te clava dentro
es porque han rozado tus miedos con el dedo
y se te está clavando un puñal
que tú mismo te habías puesto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Anemocional

 Como una caricia por todo el cuerpo, con el vello de punta y sintiendo el tacto del jersey. Soñando con tu respiración en mi hombro y un te...