jueves, 17 de diciembre de 2020

muchas flores

Te dedicaré mi tiempo
todas las veces que me duelan las costillas
de escribirme en ellas que todo pasa por algo,
sin ablandarlas para darte cobijo.
Haré de mi cuerpo una almohada para tu cara
para que te quedes siempre a mi vera
y sigas pensándome cada mañana.
Te dedicaré mis besos
hasta cuando estés triste,
porque es cuando más te debo,
para cuidarte y quererte,
para demostrarte que quiero regar tus raíces.
A ti que cambiaste de huerto,
que te estableciste en cemento
y cambiaste tu ciudad natal 
por mis lejanas latitudes.
A ti que llenas de grietas el suelo
porque dices que por mi rompes matrices,
que te atreves a mudarte a donde sea
y que te quedas a vivir, sin hace falta, en mis railes.
No se qué es más romántico 
si haberme tatuado algo por ti
o haberte mudado a esta ciudad tan llena de grises
solo porque en ella viviera.
No sé si por romántico lo considero duradero
y por duradero a longevo en el tiempo
o a que nos acordaremos por siempre,
pero siento tanto amor en el pecho...
siento que también sientes lo que siento.
Te dedico mi tatuaje porque todo pasa por algo
y algo tuvo que pasar en mi vida
para que acabásemos juntos,
tú que fuiste mis principios,
tú que huiste de tu tierra,
para plantarte en este cemento,
en esta tierra seca, 
solo porque yo vivo aquí dentro.
Algo tuvo que salirme bien
para que me dediques tu tiempo,
para que yo crea que lo merezca,
tú que arrancaste tus raíces
y las plantaste cerca de mis ojeras.
Te daré mis manos para que las tomes como regaderas,
para que bebas de mi lo que quieras,
para que riegues tu cuerpo,
gimas y llenes tus venas.
Tú que me miras siempre
como si tuviese el pelo lleno de flores,
como si tú jardín fuese obra mía
y me quisieras porque te traje la primavera.



domingo, 6 de diciembre de 2020

Paz pa dormir

Estoy tan cómoda tumbada en tu sofá,
cuando te duermes y respiras a mi oído,
te despiertas y me besas el cuello,
no solo se por eso que te despertaste,
te gusta llamarme por un mote en bajito.
Dependiendo de a qué hora nos tumbemos hay varios planes,
si es por la mañana nos abrazamos 
hasta que nos rugen las tripas y desayunamos
o vamos al rastro con tu familia;
si es por la tarde,
nos tumbamos y dormimos,
vemos pelis y estamos abrazaditos,
a veces leo mientras duermes,
a veces me acaricias el pelo cuando duermo.
Si es por la noche
(mi horario preferido)
finjo que me quedo dormida y me dices:
“Niña, ¿quieres que vayamos ya a la cama?”
y finjo que me despierto y vamos a tu habitación,
depende del calor me quito o me pongo ropa,
abro la cama y me tumbo siempre primero,
nos da igual el lado,
ambos solemos evitar ese muelle que se clava en el hombro y que hace ruido si follamos por la mañana.
Nos quedamos acariciándonos a oscuras,
nos besamos un rato largo (o corto, depende)
y nos damos las buenas noches.
“Te quiero” “Y yo a ti”
y hasta mañana,
que me despierto cuando te das la vuelta
y me giro para abrazarte por la espalda,
como dices que te gusta,
y te acaricio hasta que te despiertas.


Anemocional

 Como una caricia por todo el cuerpo, con el vello de punta y sintiendo el tacto del jersey. Soñando con tu respiración en mi hombro y un te...